Cualquier jardín puede tener de un sistema de riego automatizado, ya que de esta forma reducirá casi a cero el tiempo que Usted le tendrá que dedicar para que se encuentre siempre bien hidratado; sin embargo, dependerá de su presupuesto.
El costo se define en función de las dimensiones del terreno, tipo de vegetación, número de secciones, características del terreno, clima, tipo de aplicación, complejidad de instalación, recursos disponibles, como agua, cisterna, etc.
Es un conjunto de equipos y accesorios que se encargan de regar sus áreas verdes y mantenerlas hidratadas. Uno de los accesorios principales es el controlador o “timer”, mediante el cual podremos programar diferentes rutinas de riego; como son horarios y tiempos de riego por sección de su jardín. También es quien decide si prende o no el sistema, mediante señales de dispositivos como el sensor de lluvia. Este último evitará que se riegue y desperdicie agua cuando ha llovido.
En su concepción más simple, un sistema de riego es programado para iniciar el riego a una(s) hora(s) específica(s); sin necesidad de que haya una persona presente para que se realice este proceso.
Todos nuestros sistemas cuentan con un sensor de lluvia que capta el agua precipitada y evita regar cuando ha llovido recientemente, y permitiendo regar nuevamente cuando el sensor ha evaporado el agua captada durante la lluvia.
La instalación de la tubería es la tarea que afecta más a la jardinería, por lo cual este proceso es realizado por maquinas zanjadoras o personas capacitadas para reducir al mínimo el daño del pasto.
Si el sistema fue correctamente instalado, el mantenimiento requerido es mínimo; bastará con realizar el cambio de la batería de respaldo del programador (para evitar que éste pierda la programación en cuando hay un apagón) y limpiar boquillas, filtros y válvulas de todo el sistema. Este tipo de servicios, normalmente no tienen un costo mayor al 4% del costo total del sistema.
